Mantenimiento de piscinas

Mantenimiento de piscina

Llega el verano y es hora de poner tu piscina a punto.

En Laurel Pinturas te damos 10 consejos para el mantenimiento del agua de tu piscina

  1. Cuidar una piscina implica el uso de determinados productos. Hazte con todos los productos químicos necesarios para conservar el agua en perfecto estado. También es importante que conozcas el tamaño y la capacidad de la piscina, porque en función de ello tendrás que aplicar una cantidad u otra de estos productos. Además, si la piscina ha estado en desuso durante todo el invierno, deberás hacer un tratamiento de choque para ponerla en marcha. En ese sentido, existen tres tipos de químicos que no pueden faltarte nunca:
    • Cloro.
    • Alguicidas.
    • Productos de tratamiento de choque.
  2. Familiarízate con el pH del agua. Los niveles del pH te indican la alcalinidad o acidez. Vas a necesitar mantener estos niveles estables (lo ideal sería entre 7,2 y 7,6) para evitar la proliferación de algas, la acumulación de sedimentos y las posibles irritaciones en piel y ojos. Y para ello existen ciertos “controladores” (en ese sentido, puedes encontrar unos kits en el mercado que sirven para medir el pH y el cloro del agua). Todos los factores están relacionados y se mantienen en un equilibrio constante, por eso es imprescindible mantener el pH bajo control para que el resto de medidas resulten verdaderamente efectivas.
  3. Para mantener el agua de la piscina bien desinfectada y transparente, tendrás que recurrir a algún método de desinfección. El más común es el cloro. Mira siempre las instrucciones de uso en función del tamaño de tu piscina, pero para que te hagas una idea, deberás diluir cada 5-6 días unos veinte gramos de este producto químico por cada quince metros cúbicos de agua.
  4. A fin de prevenir posibles problemas de algas en tu piscina, siempre es aconsejable hacer uso de los alguicidas. Los alguicidas son una sustancia química que previene la aparición de algas en la piscina. Por ejemplo, un síntoma de que hay algas es cuando el agua aparece turbia y de color verdoso. Además, la acción conjunta del alguicida con el cloro suele potenciar la eficacia de sus efectos.
  5. Para reducir los fuertes olores del cloro, la irritación en los ojos y mantener el agua bien transparente, puedes utilizar productos o agentes de choque. Los hay de varios tipos (básicos y funcionales), y sus características principales son:
    • Suavizan el cloro del agua.
    • Eliminan las bacterias.
    • Descomponen lociones bronceadoras o cualquier otro residuo similar.
  6. Limpia manualmente y a diario tu piscina con cepillos recoge hojas o similares, a fin de eliminar cualquier residuo visible en la superficie del agua, que si no lo recoges acabará depositado en el fondo.
  7. Para evitar la acumulación de sedimentos en paredes y fondos, los robots automáticos y los limpia fondos manuales te serán muy útiles. Los hay de diferentes tipos, busca el que mejor se adecúe al tamaño, materiales y forma de tu piscina.
  8. En cuanto a la adecuada circulación de agua, deberás limpiar con frecuencia la bolsa del skimmer, que es donde se suelen acumular las hojas e insectos.
  9. La limpieza y desinfección del espacio y del entorno de la piscina es fundamental. Friega los bordillos, pavimentos y duchas para evitar que la suciedad se incruste.
  10. Por último, cuida el césped y los espacios que rodean a tu piscina, ya que toda la suciedad y residuos presentes en él pueden acabar en el agua.

Mantenimiento piscina

Y ahora que ya sabes cómo afrontar el mantenimiento de piscinas en verano, ¡limítate a disfrutar!